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Drenaje linfático
manual
El drenaje linfático manual, también conocido como método LDMV -recordando a su creador, el doctor Vodder-, es una técnica especifica de masaje manual que utiliza maniobras de presión en círculos en la dirección de los ganglios linfáticos con suavidad y de forma rítmica. Su objetivo es ayudar a eliminar los líquidos y a reabsorber los edemas.

El LDMV se diferencia de cualquier masaje convencional porque es un método exclusivamente linfológico. Mundialmente reconocido como tratamiento que protege la salud, el linfodrenaje mantiene y estimula la regeneración celular, desintoxica el organismo y potencia el rejuvenecimiento y el equilibrio del sistema nervioso. Sus efectos son internos y externos: activa la circulación sanguínea, mejora la microcirculación y representa una alternativa muy eficaz para combatir la celulitis al contrarrestar la retención y disolver los depósitos de grasa acumulada en el cuerpo. Sus resultados son físicos pero también emocionales al convertirse en una experiencia relajante y terapéutica que calma, reduce los niveles de estrés y aumenta la energía.
¿Cómo funciona?
Las suaves maniobras manuales, casi como caricias, precisan de un detallado conocimiento anatómico y fisiológico del cuerpo humano y del sistema linfático y han de ser realizadas por un especialista. El drenaje desplazará la linfa y el líquido intersticial desde la zona donde se ha ido acumulando hacia una especie de «desagüe» como son los ganglios linfáticos y de allí a su evacuación normal hacia el torrente venoso.
Sus beneficios son muy amplios y Variados:
- ANTIEDEMATIZANTE
- TRANQUILIZANTE
- RELAJANTE
- ANALGÉSICO
- INMUNOLÓGICO
- DESINTOXICANTE ENTRE OTROS MUCHOS
En definitiva, el LDMV es un método muy recomendado para el bienestar general y para un mantenimiento saludable del organismo.
Efectos secundarios y contraindicaciones del Drenaje linfático manual
Está contraindicado en pacientes con enfermedades graves como cáncer, trombosis, descompensación cardíaca, varices con relieve, etc… También hay que valorar con el médico la idoneidad o no del linfodrenaje en caso de inflamaciones crónicas, tromboflebitis, trastornos funcionales del tiroides, hipotensión, embarazo o insuficiencia renal crónica.